El legendario y virtuoso citarista indio Ravi Shankar falleció a los 92 años de edad, tras someterse a una cirugía en Estados Unidos. Con una carrera que abarcó más de seis décadas, Shankar se consolidó como el citarista más célebre del siglo XX. Su legado no solo perdura en la música clásica india, sino que también influyó profundamente en la música occidental, especialmente en los años 60 y 70.
La influencia de Ravi Shankar en la música occidental
Ravi Shankar desempeñó un papel fundamental en la introducción de la música de la India en Occidente. Su impacto fue notable en la música clásica, el rock y el pop. Su estrecha relación con George Harrison, guitarrista de The Beatles, fue uno de los catalizadores de este fenómeno. Harrison, tras conocer a Shankar, comenzó sus estudios del sitar, lo que influyó enormemente en la dirección musical de los Beatles. Composiciones como «Norwegian Wood» y el álbum Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band integraron el misticismo de la música india con notables colaboraciones de Shankar.
Shankar fue un pionero de lo que se denomina World Music, uniendo el sonido oriental del sitar con las melodías occidentales. Esta fusión no solo modificó el paisaje musical global, sino que también cambió la percepción que los occidentales tenían de la música india, estimulando un interés profundo que se extendió a través de generaciones.
La influencia de Shankar en músicos como Yehudi Menuhin y Philip Glass demostró la versatilidad del sitar y su capacidad de interactuar con otras formas musicales. Con Menuhin, lanzó el influyente álbum West Meets East, lo que marcó uno de los primeros intentos serios de mezclar las tradiciones musicales de Asia y Europa.
Primeros años y formación musical
Ravi Shankar nació en 1920 en Varanasi (Benarés), India, una de las ciudades más antiguas y espiritualmente significativas del país. Nació en una familia brahmán, lo que le permitió un acceso temprano a las formas artísticas y culturales más influyentes de la India. Desde niño, su pasión por el arte fue evidente gracias a la influencia de su hermano mayor, Uday Shankar, un famoso bailarín y coreógrafo.
A la edad de 13 años, Ravi Shankar dejó la India para unirse al grupo de danza de su hermano, viajando por todo el mundo e inmerso en las tradiciones artísticas y culturales internacionales. En París, donde pasó varios años, entró en contacto con una gama diversa de influencias musicales que más tarde se manifestarían en su futura carrera.
A los 18 años, Shankar tomó la decisión trascendental de abandonar la danza y dedicarse por completo al estudio del sitar. Bajo la tutela del gran maestro Ustad Allauddin Khan, Shankar comenzó un viaje espiritual y musical que lo llevó a ser uno de los más grandes exponentes de la música clásica india. Durante su formación, vivió en un gurukul, siguiendo una estricta disciplina bajo la enseñanza de Khan, lo que le permitió absorber los principios técnicos y espirituales que dieron forma a su estilo único.
La relación con George Harrison y The Beatles
Shankar fue, sin duda, el maestro que presentó la espiritualidad y la música india a George Harrison, guitarrista de The Beatles. Su colaboración fue mucho más allá del ámbito musical, desempeñando un papel crucial en la evolución espiritual y personal de Harrison. El guitarrista no solo aprendió a tocar el sitar, sino que también adoptó muchas de las filosofías espirituales y de vida que Shankar promovía.
La influencia de Shankar en los Beatles fue profunda. En 1968, la banda decidió viajar a Rishikesh, India, para estudiar con el Maharishi Mahesh Yogi, llevando la espiritualidad india a un nivel más prominente dentro de su música y filosofía. Durante este período, la banda escribió y grabó numerosas canciones que reflejaban los sonidos y las ideas de la música clásica india, marcando una etapa crucial en su evolución artística.
Las piezas «Within You Without You» y «The Inner Light«, compuestas por Harrison, fueron un testimonio de esta influencia. Ambas canciones emplearon instrumentos y técnicas de la India, algo jamás visto en el mundo del rock hasta ese momento.
Su impacto en el cine y colaboraciones internacionales
Ravi Shankar también dejó su huella en el mundo del cine. Composiciones tan importantes como las de la Trilogía de Apu del director Satyajit Ray ayudaron a definir un nuevo estilo de cine indio. Shankar combinó raga tradicional con sonidos innovadores, creando una atmósfera única en las bandas sonoras. Su trabajo en Gandhi, la famosa película de Richard Attenborough, lo llevó a ser nominado a un Óscar, reconocimiento que reafirmó su relevancia más allá del mundo de la música.
La colaboración con Philip Glass en la obra Passages fue un ejemplo impresionante de cómo Shankar logró fusionar estéticas musicales tan dispares. Esta obra combinó la sensibilidad minimalista de Glass con la rica tradición de la música clásica india, creando una experiencia musical única que sigue siendo admirada hasta el día de hoy.
Otros grandes músicos clásicos como Yehudi Menuhin y John Coltrane también encontraron en Shankar una fuente inagotable de inspiración, demostrando que la música, en su forma más pura, es un lenguaje universal.
El legado de Ravi Shankar como pionero de la música fusión
Ravi Shankar es reconocido como el pionero de la fusión entre Oriente y Occidente. Su música no solo rompió las barreras tradicionales de estilo y cultura, sino que también unió a personas de diferentes trasfondos en una apreciación compartida por las ricas melodías de la India. A través de sus conciertos, grabaciones y colaboraciones, Shankar se convirtió en un embajador mundial de la música india, llevándola a Europa, América del Norte y más allá.
Además de la influencia que tuvo en músicos y compositores, Shankar fue un firme creyente en la capacidad de la música para sanar, educar y unir a la humanidad. Sus pensamientos musicales trascendieron cualquier etiqueta o género, lo que lo hizo destacarse como una figura atemporal en la historia de la música.
Uno de los momentos más memorables de su carrera fue su actuación en el Festival de Monterey en 1967 y el histórico Concierto para Bangladesh en 1971. Este último, organizado por George Harrison, fue uno de los primeros conciertos benéficos de la historia y marcó un hito, no solo por su éxito musical, sino también por su impacto humanitario. A través de su música, Shankar no solo conectó continentes, sino que también fue parte activa de importantes causas sociales.
Vida personal y legado familiar
Ravi Shankar
Ravi Shankar fue el padre de la famosa cantante Norah Jones y de la reconocida sitarista Anoushka Shankar. A pesar de las dificultades en su vida personal, incluyendo relaciones sentimentales complicadas, su enfoque en la música nunca vaciló. Ambas hijas siguieron carreras musicales por derecho propio, consolidando aún más el legado de Shankar en la música mundial.
Anoushka Shankar ha continuado el trabajo de su padre, colaborando con músicos contemporáneos y manteniendo viva la tradición del sitar a la vez que explora nuevas vías musicales. Norah Jones, por su parte, ha llevado una carrera prolífica en el jazz y otros géneros, demostrando que el talento musical corre profundamente en la familia.
Fallecimiento y legado duradero
El 11 de diciembre de 2012, Ravi Shankar falleció en San Diego, California. Contaba con 92 años, y su muerte marcó el fin de una era en el mundo de la música. Sin embargo, su influencia sigue viva a través de su música, sus grabaciones, y por supuesto, la Fundación Ravi Shankar, encabezada por su viuda, Sukanya Shankar. La fundación continúa promoviendo y preservando su inmenso legado, asegurando que las futuras generaciones conozcan y aprecien la música clásica india.
Gracias a Ravi Shankar, el sitar se convirtió en un símbolo de la conexión entre culturas y la música clásica india llegó a audiencias que nunca la habrían encontrado de otra manera. Fue un revolucionario, no solo en la música, sino también en su poder para unir a las personas de todo el mundo a través de su arte.