Friso Griego
Dentro de la arquitectura clásica, sobre todo de gran uso durante la época medieval, contamos con los denominados frisos, los cuales son más que nada elementos decorativos que se pueden encontrar en la parte exterior de grandes construcciones como por ejemplo vienen a ser las iglesias, aunque también es posible hallarlos en otras construcciones de gran importancia como edificios municipales o residencias de antiguos miembros importantes de la sociedad aristócrata. Pese a todo esto también es posible encontrar casos al interior de los edificios, ubicándose sobre las puertas o ventanas.
Ya habiendo explicado el uso del friso toca ver cuales son sus características básicas, siendo un elemento meramente decorativo que se ubica en la parte inferior a la cornisa. Como elemento de carácter decorativo hay que apreciar que puede presentarse de diversas maneras, siendo posible apreciarlo tanto como un trabajo de tallado en relieve como también pintado, o ambos casos al mismo tiempo si es necesario.
Bien se puede apreciar y reconocer un friso por sus meras características decorativas, no como otras partes de una construcción arquitectónica que pueden tener otro tipo de finalidad. En cuanto al material que pueden presentar encontramos toda clase de alternativas en cuanto a la arquitectura clásica, yendo del mármol o metales hasta la simple piedra tallada.
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