En esta ocasión vamos a hablar de los mapas. Los más comunes son los Mapas Políticos, donde se delimitan países, provincias, capitales y ciudades y los Mapas Físicos que identifican los accidentes geográficos como alturas, llanuras, mesetas y montañas que constituyen el relieve de una región.
Así mismo, de acuerdo con su intención, los mapas pueden dividirse en Topográficos o de propósito general, para representar gráficamente hechos geográficos presentes en la superficie terrestre y los principales elementos que la conforman, ya sean físicos o humanos, como vías de comunicación, relieve, hidrografía, centros poblados, demarcación territorial. Este tipo de mapas fue el más utilizado hasta mediados del siglo XVIII ya que la cartografía en ese entonces buscó el mayor conocimiento geográfico del mundo.
Los Mapas Temáticos o de propósito particular tienen el objetivo es localizar características o fenómenos específicos. El contenido abarca diversos aspectos como información histórica, política o económica; o fenómenos naturales como el clima, la vegetación y la geología. Éstos pueden ser de tipo Coropletas, los cuales muestran la distribución espacial de un fenómeno y localizan con colores o trazados diferentes el valor que ocupa el fenómeno geográfico representado o Corocromático, que presentan áreas cualitativamente diferentes, es decir, muestran la presencia o ausencia de una determinada característica en una zona dada.
Algunos ejemplos de mapas temáticos son: Turísticos, los cuales incluyen información útil para el turismo, como la localización urbana y a las vías de comunicación destacando los puntos de interés histórico, paisajístico, etc. Mapa Estadístico, representa datos descriptivos a partir de las unidades territoriales políticas y administrativas o el Mapa catastral destinado a representar los límites de la propiedad de la tierra.