Un régimen alimenticio con proteínas es esencial para un régimen donde los principales elementos nutritivos son las proteínas, en el caso de la carne se recomienda dejar de lado las carnes grasas como el cerdo y optar por las carnes magras como el pollo, el conejo, el pavo. Estas contienen pocas calorías y son perfectas para guardar la línea. En el caso del pescado, se aconseja optar por un pescado blanco que contiene menos grasas y por lo tanto menos calorías.
Los huevos son una buena fuente de proteínas pero para eliminar el exceso de calorías se recomienda solo comer la clara, se puede retirar la yema y solo cocer la clara.
Limitar el consumo de glúcidos. ¿Qué son los glúcidos? Se trata de un tipo de alimento que produce insulina en la sangre y que no se elimina por el deporte, se acumula en el cuerpo y se convierte en grasas saturadas. Y si además se consumen carbohidratos que contienen harina refinada, el valor nutricional de la alimentación es nulo.
Por consiguiente, en el caso de los hidratos de carbono conviene seguir reglas simples para beneficiarse de un cuerpo sano.
Se deben consumir hidratos de carbono a base de harina integral, su contenido nutricional es de calidad y contribuye igualmente a facilitar el tránsito intestinal y la saciedad.
No comer por la noche, en efecto es necesario quemar los glúcidos inmediatamente para evitar transformarlos en grasas. Si se comen de noche, la actividad física es casi inexistente y por lo tanto se engorda. El mejor momento para comer glúcidos es a lo largo de la primera parte del día, sobre todo si se tiene una mañana bastante intensa de trabajo.
Conviene mezclar siempre con una baja cantidad de proteínas pobres en grasas, de esta forma se reduce el consumo de glúcidos y se consumen proteínas, que son los perfectos aliados para ayudar a quemar calorías. Conviene dejar de lado los platos de macarrones a la boloñesa y optar por espaguetis con verduras y un chorrito de aceite de oliva.
Otro consejo para quemar grasas es practicar ejercicio físico. Es importante hacer deporte al menos 3 días a la semana, pero si queréis quemar calorías rápidamente, os recomendamos no hacerlo nunca después de haber comido.
Esto es porque cuando se come, el organismo está lleno de insulina, una hormona responsable de la penetración de la glucosa en las células y por lo tanto de quemar las grasas en este momento es mucho más complicado que cuando la digestión de los alimentos y de los nutrientes ha terminado. Para perder grasa, conviene hacer deporte con el estómago vacío y comer alguna cosa después del ejercicio.